La Fundació Jaume III de Mallorca se constituyó formalmente ante notario ayer al mediodía, una entidad sufragada íntegramente con fondos privados que nace con el objetivo de prestigiar y dignificar las modalidades insulares, principalmente el mallorquín. Esta fundación sin ánimo de lucro que se gesta desde hace meses, formada por ingenieros, abogados, empresarios, profesores, juristas, consultores y profesionales liberales, tiene como objetivo detener –y dar la vuelta– la degradación del mallorquín frente a la presión del catalán estándar que se enseña a día de hoy en las escuelas, y está presente en todas las administraciones y medios de comunicación públicos. (…)